El 14 de mayo de 1813, comienza la Campaña Admirable, que fue una acción militar enmarcada dentro de la guerra de independencia de Venezuela, comandada por el genio estratégico de Simón Bolívar, quien logra en menos de tres meses la emancipación del occidente de Venezuela, desde la provincia de Mérida hasta llegar y entrar triunfalmente en Caracas el 6 de agosto del mismo año. Estos éxitos, junto a los obtenidos en oriente por Santiago Mariño, darían origen a la conformación de la Segunda República de Venezuela. En esta Serie iremos recorriendo de manera resumida los antecedentes de este hecho heroico, las acciones, hasta llegar a la entrada en Caracas del Libertador y reconociendo a los héroes de esta gesta monumental.
Bolívar desterrado después de la pérdida de la 1era República de Venezuela, llega a finales de octubre de 1812 a Cartagena de Indias (la actual República de Colombia), luego de un breve paso por Curazao.
El 15 de diciembre 1812, Bolívar y Vicente Tejera escriben en la ciudad de Cartagena la Memoria dirigida a los ciudadanos de la Nueva Granada por un caraqueño, más conocida como Manifiesto de Cartagena, en este documento analiza y da opiniones de las causas de la caída de la Primera República de Venezuela, en particular culpa al federalismo adoptado por la Constitución, y propone una estrategia general para la independencia de ambas naciones, luchando juntas para recuperar Caracas.
DESCARGA EN PDF EL MANIFIESTO DE CARTAGENA
En calidad de voluntario y subordinado al oficial Pedro Labatut, Bolívar comienza su fulgurante carrera militar como comandante de Barrancas (21/12/1812), población ubicada a los márgenes del río Magdalena. Bolívar decidirá por su propia cuenta avanzar lo más rápido posible hacia el enemigo, aprovechando el factor sorpresa, su táctica bélica fundamental. El balance de las vertiginosas acciones de Bolívar es descollante: había llegado a Barranca con 70 hombres apenas armados; derrotó a los españoles y tomó las plazas de Tenerife, Mompós, El Banco, Chiriguaná, Tamalameque y Puerto Real y encontrábase ahora con una fuerza de más de 700 hombres armados en su propio Cuartel General de Ocaña (08/01/1813). ¡Todo ello en sólo 17 días! Tiempo suficiente para limpiar de enemigos la región del Bajo Magdalena, despejar el camino hacia Cúcuta y el Táchira, punto limítrofe de Nueva Granada y Venezuela.
El 28 de febrero de 1813 se produce la Batalla de Cúcuta, Bolívar reforzado con cien hombres que le llegan de Pamplona, vence en San José de Cúcuta al grueso de las tropas realistas comandadas por el Coronel Manuel Correa, quien se retira hasta La Grita. Por sus méritos en el campo de Batalla, el Congreso Unido lo nombra Brigadier de los Ejércitos de la Unión y ciudadano de la Nueva Granada. En la Jornada se destaco el Coronel José Félix Ribas quien primero con artillería y caballería forzó palmo a palmo la victoria que fue finalizada con una carga de bayoneta al acabarse las municiones.
Bolívar tenía un plan más ambicioso que tan solo sacar a los realistas de territorio neogranadino, su plan era reconquistar Venezuela, por lo que solicita el debido permiso ante el gobierno neogranadino y Camilo Torres (Presidente Ejecutivo de la Nueva Granada) con el apoyo solidario de Antonio Nariño (Presidente de Cundinamarca), ambos próceres de la independencia de Colombia, logran que Bolívar sea nombrado de Comandante en Jefe y a finales del mes de marzo de 1813 se le concede la autorización para marchar hacia la población de La Grita, en el actual estado Táchira.
El 14 de mayo de 1813 inicia la Campaña Admirable, Bolívar entra con sus tropas a Venezuela, con un contingente de 800 neogranadinos, acompañado de su Estado Mayor, entre los cuales destacan: Pedro Briceño Méndez (Secretario), Atanasio Girardot (Comandante de la Vanguardia), José Félix Ribas (Comandante de la Retaguardia), Luciano D'Elhuyar (Oficial), Hermógenes Maza (Oficial), Antonio Ricaurte (Oficial), Antonio París (Oficial).
El 16 de mayo de 1813 Bolívar entra a San Cristóbal y pasa por La Grita (Táchira) , donde sus tropas se unen al grueso de las fuerzas del Teniente Coronel Rafael Urdaneta.
El 23 de mayo de 1813 Bolívar es aclamado a su entrada en la ciudad de Mérida y recibe el titulo de Libertador. Tras los avances combinados desde Bailadores y la Grita, el ejercito patriota unificado (1500 hombres aproximadamente) toma la ciudad de Mérida. Gran parte de la fácil entrada victoriosa a Mérida se debe al ingenio y astucia de Bolívar, quien despacha falsos "informes confidenciales" que debían caer en manos del enemigo y en los cuales se refería de numerosos refuerzos que esperan los ejércitos republicanos para su marcha hacia Caracas, al enterarse de esto el Coronel realista Manuel Correa abandona su ventajosa posición en la ciudad de Mérida. En Mérida se une al ejercito libertador Vicente Campo Elías con el grado de Capitán y con un contingente de 500 hombres.
Del 01 de Junio al 13 de Junio de 1813 se llevaron a cabo múltiples Combates Campales, bajo la jefatura de Atanasio Girardot, estos fueron: Combate Campal de las Trincheras de Betijoque (01/06/1813); Combate Campal de Escuque (02/06/1813); Combate Campal de El Colorado de Escuque (03/06/1813); Batalla de El Cequiòn en la Ceiba (06/06/1813); Batalla de el Llano de Matìas, en La Ceiba (07/06/1813); Combate Campal de Los Higuerones o Higuerotes en Bolivia (12/06/1813); Combate Campal de Los Cuarteles en Carache (13/06/1813). En estos combates Girardort estuvo acompañado de patriotas trujillanos que se incorporaron activa y valientemente en la lucha, entre quienes destacan: Barbarita de la Torre, Miguel Vicente Cegarra, José Manuel Arraiz, Manuel Antonio Gorgoza y Andrés Linares entre otros.
El 04 de Junio de 1813 se desarrolla la Batalla de Ponemesa, las tropas comandadas por Atanasio Girardot divisan a las tropas enemigas del realista Ramón Correa, Girardot ordena a los oficiales Ricaurte, D"Elhuyar, Maza, Yépez Roldán y Gorgorza, para que ataquen. Las tropas realistas de Ramón Correa se diezmaron ante la arremetida patriota y huyeron hacia el Lago de Maracaibo.
El 15 de Junio de 1813 Bolívar llega a Trujillo y ante las atrocidades cometidas por las fuerzas realistas comandadas por Domingo de Monteverde, procede a dictar el Decreto de Guerra a Muerte: …"Españoles y canarios, contad con la muerte aún siendo indiferentes… Americanos contad con la vida aún cuando seais culpables«, con respecto a esta medida comenta Urdaneta en sus memorias: «De aquí se deducen dos consecuencias necesarias: que los españoles, sabiendo que encontraban una muerte cierta se acobardarían como sucedió, y que los criollos engrosarían las filas de BOLÍVAR, como era necesario. Los resultados de la ocupación de Caracas justificaron la medida exuberantemente.»
El 18 de junio de 1813 se produjo la Batalla de Carache o de Agua de Obispos entre las fuerzas patriotas comandadas por Atanasio Girardot y las realistas comandadas por Manuel Cañas, resultando el triunfo del jefe patriota, capturando varios prisioneros y mucho material de guerra y, eliminándose las tropas que podían entorpecer el avance de Bolívar, quien desde Trujillo ordenó a Ribas que marchase lo más rápidamente de Mérida en dirección de Boconó, con el objeto de facilitar el factor sorpresa. En esta Batalla se integra al ejercito Libertador José de la Cruz Carrillo.
El 01 de julio de 1813 es liberada la población de Guanare. Debido al avance del ejercito patriota, las fuerzas realistas abandonan la población, dejando tras de sí un valioso baúl o arcón con 200.000 pesos producto de la Real Administración de la Renta del Tabaco, lo que aseguro los abastecimientos y pertrechos necesarios para continuar la campaña.
El 02 de julio de 1813 se libra la Batalla de Niquitao, donde una columna realista con 800 hombres al mando del comandante Martí fue atacada por Ribas y Urdaneta, fue totalmente destruida después de varias horas de duro combate. Los patriotas lograron una contundente victoria a pesar de su desventaja numérica.
El 06 de julio de 1813, Bolívar ingresa a Barinas. Con la victoria alcanzada en Niquitao, el camino para la ciudad de Barinas queda despejado y Barinas, Mérida y Trujillo se convirtieron en un gran centro de recursos en hombres, dinero y provisiones. Nuevamente, el Libertador impartirá órdenes veloces y fulminantes: mandaría a Ribas a romper las filas de la escuadra del realista Oberto en la llanura de Los Horcones.
El 12 de julio de 1813, Bolívar envía una carta escrita a Santiago Mariño, donde reconoce las acciones e iniciativas tomadas por Mariño para liberar al oriente del territorio, en la misma lo invita a entrar juntos a la ciudad de Caracas...“para que hagamos juntos una entrada en la ilustre capital de Venezuela. (...) ofreciéndole yo mis más sinceros homenajes de consideración y respeto”.
El 22 de julio de 1813, se libra la Batalla de Los Horcones (entre Barquisimeto y Quibor), es uno de los combates más sangrientos de la Campaña. El combate fue comandado por el Coronel José Félix Ribas a la cabeza de aproximadamente 700 hombres, quedando derrotadas las tropas realistas comandadas por los oficiales Oberto, González y Cañas con un aproximado de 1.500 soldados. En la refriega tienen también participación destacada Jacinto Lara y Florencio Jiménez.
El 26 de julio de 1813 Bolívar llega a San Carlos, donde se reúnen las tropas de Urdaneta, Ribas y Girardot. De esta manera, Bolívar designa a San Carlos como punto de concentración.
El 31 de julio de 1813 se libra la Batalla de Taguanes en la Sabana o llanura de Taguanes (entre Tinaquillo y Valencia), en la cual las tropas republicanas encabezadas por Bolívar, baten a las fuerzas realistas comandadas por Francisco Izquierdo. La victoria patriota fue contundente y total. En la Batalla Bolívar atisba el vasto ejército de Izquierdo, y acometerá una de las maniobras más ingeniosas de que se tengan noticias: hacer montar en las ancas de los caballos uno o dos infantes, mandandoles que sostuviesen el fuego, mientras los jinetes guíaban los caballos cerca del enemigo, para que se apeasen y peleasen cuerpo a cuerpo.
Bolívar, prosigue la marcha a Caracas, entra el ejército republicano en La Victoria el 3 de agosto de 1813. En esta población, Bolívar inicia el 04 de agosto negociaciones para acordar una honrosa capitulación.
El 06 de agosto de 1813 Bolívar entra victoriosos a Caracas y es aclamado por sus habitantes, el Ejército Libertador entra en la ciudad y culmina la Campaña Admirable. Allí formaliza una capitulación con las tropas realistas acantonadas en La Guaira y seguidamente; constituye un Gobierno Central Provisorio para las Provincias libertadas, quedando cada provincia bajo el mando de un Gobernador Político y un Jefe Militar. Bolívar asume el gobierno y el mando supremo de la República
Durante el año de 1813 las fuerzas patriotas combinadas desde oriente y occidente, lograrían la restitución de la llamada Segunda República, Bolívar comandando un ejercito desde la Nueva Granada recorre 1200 km desde San José de Cúcuta liberando el Occidente del país con su Campaña Admirable, en tanto Santiago Mariño, al frente de un pequeño grupo inicial logra liberar con su Campaña de Oriente el otro extremo del país.
Se designa como Campaña Admirable a la estrategia militar y política efectuada por Simón Bolívar entre San Antonio del Táchira y Caracas, de marzo a agosto de 1813. Después del naufragio de la Primera República el 25 de julio de 1812, Bolívar buscará el respaldo del Congreso de la Nueva Granada para brindar como “voluntario” su experiencia a aquel país en la consolidación de su independencia. “La suerte de la Nueva Granada está íntimamente ligada con la de Venezuela: si esta continúa en cadenas, la primera las llevará también”, sentenciará. Dos alocuciones importantes cierran filas en esta campaña emblemática: uno, el Manifiesto de Cartagena (15 de diciembre de 1812), donde Bolívar instruye a los neogranadinos sobre cómo estabilizar su endeble independencia y sobre cómo América debía sacar de raíz al enemigo español, esto es, mediante la unidad grancolombiana; y dos, el Decreto de Guerra a Muerte (15 de junio de 1813), donde impulsará con persistencia la lucha contra el poder español y sus atrocidades en territorio venezolano. Lo admirable descansa en su rapidez, solidez y sorpresa, única forma alcanzar la victoria ante el más fuerte ejército de Domingo de Monteverde, el cual en tan solo tres meses capitularía estruendosamente a manos de Bolívar y su cuerpo de comandantes. Con este triunfo, que valió a Bolívar el título de El Libertador, se dará inicio a la Segunda República.
No hay comentarios:
Publicar un comentario